El diseño no solo cambia objetos. Cambia sistemas, modos de producción y formas de vivir. Pocos diseñadores industriales lo entienden tan profundamente como Emiliano Godoy.
Desde su estudio en Ciudad de México, Godoy ha liderado una cruzada silenciosa y potente: demostrar que el diseño sostenible no es una tendencia, sino una responsabilidad urgente.
En Esbozo, admiramos su enfoque riguroso, ético y radicalmente humano, que conecta diseño, ecología y economía circular. Su trabajo nos inspira a pensar más allá del objeto, y a ver en cada proyecto una oportunidad de transformar el mundo.
¿Quién es Emiliano Godoy?
Emiliano Godoy nació en México en 1974. Estudió diseño industrial en la Universidad Iberoamericana y luego en Pratt Institute en Nueva York. Desde temprano en su carrera, decidió apartarse del camino tradicional de la industria y comenzar uno propio: el diseño con conciencia ecológica y social como núcleo.
En 1997 fundó Godoylab, un estudio que ha sido pionero en desarrollar productos y estrategias centradas en la sostenibilidad, el bajo impacto ambiental y el diseño regenerativo. Su trabajo ha sido expuesto y premiado internacionalmente, pero su enfoque se mantiene en lo esencial: crear con sentido.
Diseño industrial con impacto positivo
Godoy no diseña para la obsolescencia ni para el mercado rápido. Diseña para perdurar, reciclar, reintegrar. Cada uno de sus proyectos considera todo el ciclo de vida del producto: desde los materiales hasta el modelo de negocio.
Sus principios de diseño sostenible incluyen:
- Uso de materiales reciclados o reciclables
- Diseño para facilitar el desmontaje y reutilización
- Producción local, artesanal o semi-industrial
- Reducción de residuos desde la etapa de concepto
- Modelos que promueven la economía circular
“Diseñar no es solo dar forma. Es también decidir qué se produce, cómo se produce, quién lo hace y qué impacto tendrá cuando deje de usarse.”
Ejemplos de proyectos con enfoque sustentable
Uno de los proyectos más emblemáticos de Godoy es la silla Pedro y Pablo, diseñada para producirse sin generar residuos. Está fabricada en una sola pieza, utilizando madera laminada cortada por CNC, y ensamblada sin clavos ni tornillos. El desperdicio del material es mínimo y su producción puede ser replicada localmente.
Otro ejemplo destacado es su trabajo para Pirwi, una firma mexicana de mobiliario sustentable que Godoy co-fundó. Con Pirwi, ha desarrollado colecciones de muebles pensadas para minimizar el impacto ambiental, maximizar la durabilidad y cuidar la estética contemporánea.
Diseño como motor social
Además del factor ecológico, Emiliano Godoy pone fuerte énfasis en la dimensión social del diseño. Ha colaborado con comunidades locales, artesanos y cooperativas para crear productos que generen empleo digno, valor cultural y modelos de negocio sostenibles.
Ejemplo: el proyecto “Bruma”, en colaboración con mujeres de comunidades indígenas, donde se combinó diseño contemporáneo con técnicas de tejido tradicional para producir objetos textiles únicos que respetan la identidad de quienes los crean.
Godoy demuestra que el diseño no es neutral: puede reproducir desigualdades… o transformarlas.
El diseñador como estratega de sistemas
Más allá de diseñar objetos, Emiliano Godoy diseña sistemas productivos. Cuestiona cómo se produce, cómo se consume y cómo se desecha. No se conforma con pensar en materiales ecológicos; diseña también nuevos modelos económicos y de circulación de valor.
Para él, el diseño debe ser:
- Sistémico
- Regenerativo
- Crítico
- Viable comercialmente
- Estéticamente relevante
Esta visión hace que su trabajo no solo sea bello y funcional, sino profundamente transformador.
Reconocimiento internacional y pensamiento académico
Emiliano Godoy ha sido reconocido por instituciones como el MoMA de Nueva York, el Design Museum de Londres y la Bienal Iberoamericana de Diseño. Pero también ha dedicado tiempo a enseñar, escribir y compartir conocimiento.
Ha sido profesor y conferencista en universidades de México, Estados Unidos, Italia y otros países, llevando su visión a nuevas generaciones de diseñadores industriales.
En un mundo saturado de objetos sin alma, su mensaje es claro: el diseño debe ser parte de la solución, no del problema.
Lo que aprendemos de Godoy en Esbozo
Desde nuestra perspectiva multidisciplinar en Esbozo, Emiliano Godoy representa un modelo de pensamiento que trasciende categorías. Nos enseña que:
✔ El diseño gráfico, de producto o de marca puede (y debe) incorporar criterios éticos y sustentables
✔ Hay belleza en lo simple, en lo hecho a conciencia, en lo que respeta al planeta
✔ El diseñador debe entender el sistema completo, no solo su área específica
✔ La colaboración con otros saberes —artesanos, ingenieros, comunidades— enriquece el proceso
✔ Diseñar también es decidir qué no hacer: rechazar materiales, procesos o fines que atenten contra la vida
Conclusión: diseñar para durar, para servir, para regenerar
Emiliano Godoy demuestra que el diseño industrial puede ser poesía funcional. Que una silla, una mesa o un textil pueden llevar en sí una declaración política, una ética de producción y una mirada a largo plazo.
Frente a una industria obsesionada con lo nuevo, Godoy propone lo necesario. Frente al consumo rápido, propone la permanencia. Frente al diseño vacío, propone el diseño con propósito.
En Esbozo, tomamos estas ideas como inspiración para crear marcas, espacios y visuales que no solo se vean bien, sino que hagan bien.